El ritmo frenético de un monólogo femenino
- Universitaria de Colombia
- 26 jul 2017
- 3 Min. de lectura

El Teatro Petra presenta “Yo no estoy loca”, la más reciente propuesta dramatúrgica de Fabio Rubiano y protagonizada por Marcela Valencia, en la que se juega con tiempos y personajes para realizar una reflexión social.
Yo no estoy loca surge de un golpe repetido y cotidiano. La seguridad con la que un sujeto lanza al viento la frase “esta vieja está loca” porque una mujer es capaz de exigir sus derechos, fue la misma convicción que tuvo Marcela Valencia para pensar que tocaba hacer algo al respecto y que ese tipo de frases, que se esbozan con facilidad y que simplemente parecen sacadas de un baúl de palabras prefabricadas, deben ser erradicadas del léxico cotidiano.
La actriz compartió la inquietud con Fabio Rubiano, su principal apoyo en el momento de crear el Teatro Petra a mediados de la década del 80, y lo que encontró en él fue el arrepentimiento inmediato por haber expresado esa sentencia en más de una oportunidad. Rubiano, como muchos otros hombres y mujeres, también había dicho “esta vieja está loca” porque sí, por el impulso mismo de la inercia de expresar algo sin tener certezas.
Marcela Valencia comenzó a compartir con Fabio Rubiano todas las veces que había sido destinataria del comentario por el simple hecho de pensar distinto a su interlocutor, por opinar sin reservas o por defender su parecer con ímpetu. Tras la charla fueron surgiendo historias cercanas de amigas que habían sido remitidas al psiquiatra por un taxista, un celador, un asesor al otro lado de la línea o por el conductor del carro contiguo. De esta manera se fue forjando la propuesta dramática de Yo no estoy loca, la más reciente obra del Teatro Petra, que se exhibe hasta el 12 de agosto en Casa E, en Bogotá.
“Vivimos en unos países donde reclamar sus derechos no está dentro de los márgenes de la normalidad para una mujer. Todas las mujeres que se salen de los convencionalismos o que se atreven a levantar la voz entonces están ‘locas’. Yo me pregunto quién está más loca, ¿una mujer o esta sociedad que se siente más cómoda si nos quedamos calladas y empezamos a mentir?”, cuenta Marcela Valencia, la protagonista de este monólogo, en el que ella tiene la misión de representar a más de quince personajes masculinos y femeninos.
El primer reto para Fabio Rubiano cuando empezó a estructurar las líneas de Yo no estoy loca fue pensar en abordar lo que llaman “locura” no desde el escenario profesional de la salud, sino desde el comentario del día a día que se manifiesta con el simple propósito de agredir a alguien y, al mismo tiempo, con el deseo de disminuir su capacidad como interlocutor válido.
“Lo primero que hicimos fue buscar esa locura en la cotidianidad, cuando es el taxista, el celador, el marido o el señor de la EPS el que hace el dictamen psiquiátrico sobre una mujer diciéndole que es una ‘vieja loca’. Es lo que pasa cuando una mujer llega a un restaurante con su pareja y el mesero decide hablarle a él y no a ella, ella reclama sus derechos y la conclusión general es que ella está loca. Todas las historias que se muestran sobre las tablas están basadas en hechos reales”, dice Fabio Rubiano, quien siempre creyó que la mejor manera de transmitir el mensaje y de dejar una inquietud mayor en los espectadores era a través del empleo del formato del monólogo.
En Yo no estoy loca, Marcela Valencia aparece sola sobre las tablas pero está respaldada por un guión contundente y tiene, además, la complicidad del público que aporta algunas líneas vitales dentro del desarrollo de la historia. Por esa participación espontánea es que nunca la pieza es la misma. La actriz tiene la misión de estar atenta a los comentarios en el auditorio para identificar en cuáles partes vale la pena hacer énfasis y en dónde es mejor seguir el desarrollo normal planteado desde el libreto.
Los otros protagonistas de este montaje del Teatro Petra son invisibles pero contundentes. El sarcasmo, el vértigo porque pasa de todo en un poco más de una hora de duración, y el humor como arma letal, muestran el universo femenino de una manera amplia y plantean interrogantes para reflexionar a quiénes se les está llamando “locas” y cuál es la razón real de esta sentencia.
“Yo no estoy loca”. Teatro Petra. Hasta el 12 de agosto con funciones de miércoles a sábado. Casa E Múltiplex, Avenida Carrera 24 N° 41-69, Parkway - La Soledad (Bogotá). Teléfono: 744 0422.
Kommentare